mércores, 3 de xuño de 2015

Cómo era iso de lembrar só cando te conectas?

http://boyirl.tumblr.com


Non quero queixarme máis. Non quero ter medo á xente. Non quero calar, tampouco quero marchar á casa soa. Traballar soa si, pero logo xuntalo co teu curro. Querida bandmate, quero que metamos a nosa carta nunha botella, e que a botemos ao outro lado do mar. E a medida que se alonxa, ir esquecendo o difícil que é crear en colectivo. 

Cantora nocturna

                               Joe, macht die Musik von damals nacht...

La que murió de su vestido azul está cantando.
Canta imbuida de muerte al sol de su ebriedad.

Adentro de su canción hay un vestido azul, hay
un caballo blanco, hay un corazón verde tatuado
con los ecos de los latidos de su corazón
muerto.

Expuesta a todas las perdiciones, ella
canta junto a una niña extraviada que es ella:
su amuleto de la buena suerte. Y a pesar de la
niebla verde en los labios y del frío gris en los
ojos, su voz corroe la distancia que se abre entre
la sed y la mano que busca el vaso.

Ella canta.

*
Alejandra Pizarnik

Le este poema bandmate, trágao ben. Fala de curarse cantando. Cúrome cando traballamos con esa dor imbuida de muerte que me fixo escribir isto tempo atrás. Absólvome cando recitamos estes versos, a memoria non perdoa. Saco estas letras do peito e douchas aínda sangrando:
 *

Me gustaría que alguien me dijera qué camino tomar: el de la memoria o el olvido. ¿Una pastillita para olvidarlo todo, o para convertir los recuerdos en tinta pixelada, en pantalla “cuática”, en iris de máquina?

Cómo era eso de recordar sólo cuando te conectas.
Limpiar la obsesión.
Cómo era eso de recordar sólo cuando te conectas.
Limpiar la obsesión.
Sólo cuando te conectas.
*
Días extraños donde conectarse a la máquina para vivir un sueño artificial por encargo. Si no tienes piernas, tu sueño puede ser correr por la playa. Si sientes hambre y vives al sur del mundo, sabrás lo que es un manjar interminable. Si quieres estar en Chile, sentirás cómo las olas te mecen hasta reencontrarte con tu mapuche. "Es verdad que los colectivistas no poseemos". Pero eres un poco mío, porque durante dos meses vivimos en esta baldosa. La punta de tu nariz en mi punta. Memorias empatadas. Recuerdo infinito.
Difícil averiguar cómo matarte.

Ningún comentario:

Publicar un comentario