mércores, 27 de maio de 2015

Girls invented punk rock not England*, unha reseña de "Cómo se hace una chica" de Caitlin Moran



Xa se pode ler a miña reseña (en castelán) sobre a novela de Caitlin Moran Cómo se hace una chica (Anagrama, 2015). Aquí no blog de La Central.
O diario en papel que a publica está disponíbel na rede de librarías en Madrid e Barcelona, ata fin de existencias. Na rede aquí.


Caitlin Moran sabe que no todas somos tan valientes como ella, o que no todos tenemos las cosas tan claras desde edad temprana, por eso ha elegido hablar de las jóvenes solitarias. Su novela, más que un manual de autoayuda, funciona como un manifiesto. Este es el diario de una adolescencia trasunto de la suya. La historia está protagonizada por Johanna Morrigan: divertida (pobre), empoderada (gorda) y lista (inexperta). Esta chica sabe que en otro momento histórico hubiera sido una obrera como cualquier otra, de existencia triste y esclava, sin libros, ni música, ni trenes para ir a Londres. Pero aquí y ahora, a pesar de vivir bajo el yugo de Tatcher en un barrio obrero en los años noventa, puede hacerse a si misma. Puede pretender ser alguien, no ser invisible, algo que la obsesiona.


La escritura es la puerta de salida de la casa de protección oficial que papá, un músico fracasado, mantiene a base de fraudulentas ayudas estatales a la invalidez. Así, Johanna crea su propio personaje “Dolly Wilde” crítica musical, para irse a un Londres cuyo combustible es la música. The Smiths, My Bloody Valentine, Tennage Fun Club, Bikini Kill, Pixies, The Fall... le hacen de banda sonora a personajes con los que se identifica de la televisión y la literatura, y a los que convierte en sus referentes de la cultura popular, para construir una identidad resistente, que se tiene que ganar todo a pulso, y una feminidad fuerte, que lo tiene todo más difícil.“Oir a las mujeres cantando canciones sobre ellas mismas, y no a los hombres cantando sobre las mujeres, hace que de repente todo parezca maravillosamente claro, y posible. Cuando eres adolescente las canciones son mágicas, te hacen creer que puedes cambiar las cosas. Como reza una camiseta de Kim Gordon: Girls invented punk rock not England.

Punk y consistente, este texto semiautobiográfico del devenir adulto en la Inglaterra profunda, no está exento de crítica social. Por ello, es un rockstar working class hero al que Johanna idolatra, el que mejor nombra en entrevistas y artículos la conciencia de clase de la protagonista: «Cuando la clase media se pone vehemente hablando de política, está pensando en sus privilegios: sus amnistías fiscales y sus inversiones. Cuando los pobres se ponen vehementes hablando de política, están luchando para sobrevivir».

La trama todavía se desarrolla en ese finales del siglo XX donde votar a la derecha o a la izquierda suponía algún cambio. El relato, a pesar de estar situado socialmente y de tratar el sexo con crudeza y naturalidad –mucho se ha hablado de la la escena de la masturbación que lo abre– está preñado de humor y desparpajo. Explorar el sexo forma parte de este trabajo de conocerse. Así, la autora ha confesado que no quiso rehuir el tabú, sino analizar los ejes de la sexualidad en la pubertad: la mirada masculina (male gaze) que condiciona a las chicas, y lo desconocido de su deseo. Pero sobre todo quiso mostrar el sexo en positivo, oponiéndose al imaginario cultural del que suele dar cuenta la literatura, donde las jóvenes se relacionan a partir del interés que despiertan en un hombre, normalmente mayor y experimentado.


Este libro forma parte de la misión que parece haber emprendido la escritora para legarnos lo que ha aprendido en el camino de llegar a ser ella: cómo ser mujer, cómo reinventarse, y por venir está Cómo ser famosa... Moran, que también guioniza Raised by Wolves una sitcom sobre crecer en Wolverhampton, y despotrica sobre cultura y política en Moranthology, nos contagia –con el poder de transmisión que le da la escritura y una actiud heredada de las Riot Grrrls– su impulso valiosísimo de seguir queriendo cambiar el mundo.



*lema nunha camiseta de Kim Gordon  



1 comentario:

  1. Me interesó este libro, sobretodo la parte semiautobiográfica, porque deja a la imaginación del lector la verdadera historia. Hay un libro similar que se llama No soy ese tipo de chica de Lena Dunham, la admiro por su trabajo como escritora y por Girls es una serie magnífica para esta época de incertidumbres, además es divertida e inteligente. Se las recomiendo.

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